La inmigración haitiana no disminuye los salarios de los dominicanos

Según el economista Bernardo Vega:


“Desde el punto de vista económico, la presencia haitiana retrasa la transformación de la economía, mantiene esquemas de producción que debían ir siendo sustituidos más rápidamente y detiene el crecimiento de los salarios reales”.

“En efecto, la presencia de los haitianos atrasa el proceso de mecanización del corte de la caña, de la recolección del arroz y del uso de equipos en la industria de la construcción. Además, mientras haya haitianos dispuestos a trabajar por menos, los salarios reales en el país no aumentarán”.



La riqueza y los salarios:


La riqueza de los dominicanos no aumentaría si la mano de obra haitiana desapareciera, al contrario, disminuiría. El salario de los trabajadores de la construcción aumentaría claro, pero solo relativamente. Los costos de las viviendas aumentarían, también los del azúcar y demás productos agrícolas, haciendo del país menos competitivo.

El dinero de los patronos dominicanos, como los Viccini o empresas constructoras se queda en la economía local y la dinamiza, generando a su vez empleo en otros sectores. Los trabajadores dominicanos por la competencia se ven forzados o incentivados a ampliar sus estudios, terminar el bachiller, hacer un técnico o incluso ir a la universidad.

La riqueza de una sociedad se basa en la capacidad de su gente para producir e intercambiar diferentes bienes y servicios. Mientras más gente capacitada e ingeniosa haya, que produzca e intercambie más bienes y servicios, más rica será esa sociedad. Agregar valor es lo que genera riquezas en el mercado competitivo y global. De hecho, eso es lo que los dominicanos han hecho, y por eso es que el desempleo se encuentra en el promedio latinoamericano, mientras los haitianos predominan en el sector de la construcción y otros.

Ahora nuestro país produce cacao orgánico, de mucho valor, el cual necesita tecnificación y del cual somos el primer exportador mundial. También ahora, nuestro principal producto de exportación es el aparato de transfusión de sangre, por encima de cualquier producto agrícola y minero (con excepción seguramente ya, del oro, desde el año pasado); mientras que la fabricación de chancletas, calzoncillos, etc., se quedaron atrás para dejárselo a los centroamericanos.


Si los bienes y servicios que produce una sociedad para el mercado global son muy demandados, de mucho valor, más rica será esa sociedad, y para lograr eso se necesita gente capacitada. Es cierto que hay excesos de universitarios, pero solo en ciertas carreras.

Nuestra principal fuente de divisas, el turismo, que es exportación de servicios; pero tenemos que importar muchos profesionales de la carrera de hotelería, porque aquí no hay suficientes. Si coqueros, limpiabotas y cortacañas de San Pedro se pusieran a estudiar inglés, encontrarían un buen trabajo y sueldo en un hotel; si hicieran una carrera en turismo u hotelería, serían pudientes. Los dominicanos no necesitamos ni deberíamos ponernos a vender cocos, ni a limpiar botas, ni a cortar cañas. Si los haitianos quieren esos sectores económicos, se los podemos regalar, porque después de todo, el azúcar de la caña ya no vale nada. El hecho de que todavía se siga produciendo azúcar en nuestro país es evidencia de nuestro atraso (o el atraso de los haitianos) porque no deberíamos siquiera estar produciendo eso ya. Pensar que se deberían expulsar a los haitianos para que los dominicanos lo hagan por un mayor salario es una completa locura.



La maquinaria:


Nuestra industria azucarera siempre recibió toda la maquinaria que había disponible. La trajeron siempre los cubanos americanos desde finales del siglo XIX R (página 163). ¿Recuerdan el Central Romana? El capital para la inversión de maquinarias venía desde afuera, lo traían porque era rentable y un producto altamente demandado en el mercado internacional.

Pero todavía hoy día aún con los precios del azúcar deprimidos, nuestra industria todavía sigue invirtiendo en nuevas tecnologías y maquinarias, de hecho, en los últimos años invirtieron mil millones de dólares, incluyendo la introducción de nuevas variedades de la caña, la compra de 47 máquinas cosechadoras, 300 tractores y 46 cargadoras que redujeron la utilización de mano de obra. Según el Inazucar: "aproximadante el 60 % de las labores del campo están mecanizadas" R (página 165).


Cosechadora


En todo el mundo, la mayor parte del corte de la caña se hace a mano con machete y no con maquinaria para cortar la caña (cosechadoras). Las cosechadoras aunque son más rápidas, dañan las raíces de la caña y lo que hace que sea necesaria la replantación. Además, las cosechadoras deterioran la caña y provocan una pérdida importante de sacarosa y disminución de su calidad R (páginas 348 y 349).

Colombia es el país con mayor rendimiento del mundo por hectárea cultivada de caña de azúcar, debido a que la región del Valle del Río Cauca presenta las condiciones óptimas para el cultivo de la caña de azúcar R1, R2. Hay solo 3 lugares en el mundo en donde se puede sembrar y cosechar la caña de azúcar durante todos los meses del año: en el Valle del Río Cauca en Colombia, en el norte de Perú y en Hawai.

Un informe de la Asociación de Cultivadores de Caña de Azúcar de Colombia (asocaña), atribuía el éxito al uso de innovaciones conocidas como Agricultura Específica por Sitio (AEPS), esto es, el desarrollo de nuevas variedades de la planta más adaptables al clima y suelo específico de la zona; y a técnicas de riego y manejo de fertilizantes; pero nada que ver con maquinarias. En Colombia también, la mayor parte de la cosecha de la caña se hace a mano con machete.




En cuanto a nuestro sector arrocero, entre todos los agricultores comerciales, los que utilizan medianas y grandes extensiones de tierras, los procesos están altamente mecanizados R1 (página 184), R2. En tiempos anteriores, la cosecha del arroz requería de muchísima fuerza de trabajo y ardua laboriosidad R. Ahora todo el proceso lo hace una máquina cosechadora de arroz llamada “combinada”, que hace múltiples funciones a la vez: el corte de la planta, luego el desmenuce para extraer el grano, y finalmente la limpieza de este. Ya no se requiere de mano de obra intensiva para cosechar el arroz; y hasta para sembrarlo, en las zonas donde el suelo lo permite, se utiliza el "sistema de siembra directa mecanizada en suelo seco", que requiere mínima o cero labranza.


Combinada

 

Actualmente se están introduciendo nuevas combinadas que eliminan el proceso de traslado de los sacos de arroz del campo a la carretera mediante burros. Contrario a lo que piensa Bernardo Vega, la introducción de las nuevas maquinarias en el sector arrocero no dejará sin trabajo a las personas, sino a los burros.






Y por último, ¿de dónde saca Bernardo Vega que nuestra industria de la construcción no utiliza maquinaria que haría que la construcción de un edificio sea más barato? Quien sabe. Basta comparar los precios de una vivienda pequeña en las afueras de Miami con la de una grande en el centro de Santo Domingo.

Actualmente, en Miami, el hogar más barato de 3 habitaciones, 2 baños completos, construido después de 1950 y de entre 700 y 1100 pies cuadrados (65 y 102 m²) se está vendiendo a 84 mil 900 dólares. Esto es 3 millones 565 mil pesos. El promedio de precios es de 146 200, esto es 6 millones 140 mil pesos (40 ofertas). Con las mismas características pero con un solo baño, la oferta más barata es de 40 mil dólares. Esto es un millón 700 mil pesos. El promedio de precios es de 99 428, esto es 4 millones 176 mil pesos (34 ofertas).

A nivel nacional el precio mediano de una casa en Estados Unidos en 2011, era de 160 mil dólares (6 millones 700 mil pesos), es decir, que una mitad valía más de 160 mil y la otra mitad menos. El precio promedio era de 200 mil dólares (8 millones 400 mil pesos), con una caída de 34 % desde los 303 mil que alcanzó en 2006.

En un residencial de la avenida Independencia, o en el residencial José Contreras, Pradera Verde o Mar Caribe en los km.10 y 11, los apartamentos de 3 habitaciones, 2 baños, de 110 a 150 m², primer piso, valen un poco más de 4 millones; y 3 millones 300 mil en el tercer o cuarto piso R1, R2.

En Colinas de Arroyo Hondo y Los Ríos, apartamentos de entre 60 y 80 m² de dos baños valen entre un millón 800 mil y dos millones en el tercer o cuarto piso; y de un baño entre un millón y un millón 200 mil en el tercer o cuarto piso también R.

¡Démosle gracias a los haitianos que nos construyen casas tan baratas y que han construido todas las escuelas y hospitales de nuestro país!



Por otra parte, en la construcción del nuevo acueducto de la ciudad, podemos apreciar la alta mecanización que ha alcanzado nuestra industria. Máquinas taladradoras dirigidas por un operador dentro de una cabina con aire acondicionado hace todo el trabajo de excavación; minitractores para trasladar un poco de arena que podía ser movida sin ningún problema por un solo hombre con un pala en 5 o 6 palazos, etc.
 











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